Manifiesto 25N
Yo lucho, tú luchas, él lucha y ella lo sufre. Es ella la que sufre la inestabilidad de un mundo gobernado por el patriarcado. Es ella la que cuenta las horas de sueño que le quita el trabajo para después no cobrarlas. Es ella, la que es censurada en todas partes.
Yo lucho, tú luchas, él lucha y ella también lo hace. No es una princesa, ella quiere ser el dragón, quiere ser quien se salve de ese sueño machista, quiere rescatarse el un castillo de inconsciencia. Ella no quiere ser la Barbie Princesa, ella quiere ser parte de algo más. Quiere quererse, aunque eso signifique perderlo todo, quiere mirarse al espejo y verse bien, sin maquillaje, sin mentiras y sin filtros. Ella quiere ser la bruja que arda antes de estar muerta. Quiere hacer preguntas, quiere ser científica, quiere poder ir por la calle feliz, el miedo nunca es una opción. Quiere que nadie la cuestione, que nadie justifique actos desalmados por la simple razón de llevar una falda “demasiado corta”. Hoy estáis aquí por algo grande, algo més grande que nosotros y más grande que la historia. Hoy nos hemos reunido ya que somos el futuro de una sociedad inestable, y somos los únicos que podemos equilibrar la balanza. Por eso pido que cambiemos nuestra mirada, que este discurso no sea en vano, no olvidemos a mujeres como Diana, que se vieron consumidas en una espiral de machismo que acabó con ellas. Preguntemos, hablemos y cambiemos las cosas. Porque todos somos brujas, somos gente que tiene el poder que nos intentan arrebatar, tenemos la magia de tener los ojos abiertos, es hora de deshechizar al resto.
Así que recordad: coged la escoba, poneos el sombrero, bomba de humo.
Porque millones de mujeres, jóvenes y adultas, han sido agredidas alrededor del mundo en estos últimos años.
¿Y esto a qué se debe? ¿Acaso hicieron algo para que tales acciones cayeran sobre ellas?
En absoluto, simplemente es fruto de la visión que, nuestra sociedad machista y patriarcal da sobre el rol de la mujer.
Por eso desde nuestro instituto, el Tiempos Modernos, lanzamos esta alocución para seguir luchando por un mundo en el que no debamos volver a manifestarnos por estas injusticias.
Hoy en día hemos de dar gracias por cómo se ha avanzado en este tema respecto al pasado, pero nunca olvidemos que no es suficiente, mejor dicho: todavía no lo es. Un largo camino es el que queda para lograr la igualdad de género.
La Declaración Universal de los Derechos Humanos en su artículo 1 dicta: “Todos los seres humanos nacen libres e iguales en dignidad y derechos y, dotados como están de razón y conciencia”, deben comportarse fraternalmente los unos con los otros. No obstante, durante estos últimos años se están dando cada vez más casos de vulneración a este derecho fundamental sin importar su identidad sexual.
Queremos dejar de ser una sociedad tradicional para avanzar hacia el futuro.
Muchos os preguntaréis: “¿Qué puedo hacer si no tengo el poder alguno?”.
Precisamente preguntándoos tal inquisición contribuís a la causa, cada vez que notéis cómo afloran vuestras emociones ante ello. Cualquier aportación ayuda en esta lucha, porque después de todo, nosotros somos el futuro que moverá este mundo en el que vivimos.
Para finalizar, nos gustaría añadir que nuestro instituto siempre estará dispuesto a ayudaros en este y cualquier tipo de problemas.
